Berlín, Alemania
Es una ciudad de las más importantes de Europa, quizás no tan cosmopolita como Paris o Londres, pero si con mucho movimiento y vida en sus calles. No tiene un centro, posee varios entre otros los llamados Potsdamer Platz y Alexander Platz. En el primero se ubican varios modernos edificios en altura para oficinas, restaurantes y shoppings; en el segundo, la torre de televisión en forma de aguja y varios centros comerciales y tiendas que aglutinan mucha gente en la calle que le otorga un dinamismo especial a la zona.
Otro punto destacado de la ciudad es la Puerta de Brandenburgo, una obra con mucha historia por donde pasaron entre otros Adolf Hitler, Federico II y Napoleón Bonaparte. Este último se quedo fascinado con la escultura que hay encima de ella y decidió llevársela a Paris. Hay que decir que ésta constaba de 4 caballos y un carro que pesan varios cientos de toneladas; la obra escultórica fue devuelta a Alemania años después política de por medio.
Se puede decir que caminamos la ciudad, fueron 5 días en los cuales no paramos de visitar lugares y hacer visitas guiadas ya sean pagas o “gratis”, está entre comillas porque al final vos le pones el precio a el guía que en su mayoría para nosotros eran de entre 3 y 5 euros. Es impresionante la historia que tiene esta ciudad, en su trama quedan rastros de ella que sustrato tras sustrato se han ido acumulando. El muro, el famoso muro recorre toda la ciudad pero queda poco y nada de él. La gente se llevaba pedacitos de muro picando con lo que tuviera a mano, todo turista quería tener aunque sea un trocito hasta que cercaron lo que quedaba y lo hicieron museo al aire libre. El recorrido del muro queda aun marcado en el piso mediante un pavimento diferenciado y este si recorre toda la ciudad. Un punto destacado es donde se ubicaba uno de los pasos en la época de la guerra fría, se llama Check Point Charlie y fue declarado por los berlineses como el lugar más detestados de la ciudad por ellos por la excesiva cantidad de turistas que se hace presente a sacar su foto con los imitadores de soldados americano y ruso parados enfrente a la casilla de control.
La franja de la muerte que es la zona que quedó libre después de la caída del muro, se transformó en una zona de oportunidad y está siendo rellenada con edificios. Buena arquitectura se esta construyendo y se puede ver en las siguientes fotos.
Los últimos 2 días nos quedamos en lo de Dieter, un argentino hijo de padres alemanes que nos hospedo en su casa y nos trató de maravilla. Nos pasaron el pique que alojaba gente de la generación año a año y lo llamamos. Nos esperó con la cena y cervezas, mejor imposible. Estaremos siempre muy agradecidos. Con la chilena que nos hospedó en Maryland, Usa ya son 2 las veces que conseguimos este tipo de ayuda.
